Acudía gente venida de cualquier parte del mundo en busca de una mirada. Pasó por allí una mujer bajando el mentón, mirando de frente de un modo penetrante y sensual y con los ojos semiabiertos dijo:
-Yo desearía una mirada seductora, me gusta agradar a los hombres y que me miren con deseo.
Al rato pasó un hombre con temor y desconfianza y sin fijar la mirada afirmó:
-Yo deseo una mirada paranoica, no confío en la gente y quiero que ellos lo sepan.
Después pasó por allí una chica joven, con una mirada lánguida, sin energía ni color y mirando fijamente al infinito expresó:
-Yo quiero una mirada vacía, que no tenga expresión, huyo de la gente y así evito que me hagan daño.
Luego pasó un ladrón y con voz baja dijo:
-A mí póngame una mirada esquiva, no quiero ser descubierto ni reconocido.
En aquel momento pasó una anciana con ojos caídos, enrojecidos, rojos y llorosos y dijo:
-Yo deseo una mirada triste para que los demás puedan ver cómo me siento de sola.
Entonces pasó una bruja con mirada fija y fuerte y dijo:
-Yo soy una envidiosa y quiero una mirada de mal de ojo.
Entonces pasó un maltratador y dijo:
-Yo quiero una mirada que mate, estoy lleno de rabia y odio.
-Entonces una mujer con la ceja levantada, los dientes apretados, mirando fijamente y de frente a los ojos exclamó:
-Yo quiero una mirada retadora.
Un artista que pasaba por allí dijo:
-Yo quiero una mirada ausente, siempre ando perdido en mis pensamientos.
Una vez todos hubieron pedido sus miradas Mishka se acercó a ellos mirándolos de frente de un modo suave, profundo e inocente y con afecto positivo y mirada transparente expresó:
-Siento mucho no poder satisfacer sus demandas señores, pero en el mundo ya hay muchas miradas como las suyas, así que me especialicé en un tipo de mirada concreta que hace mucha falta: yo sólo vendo miradas amorosas.
En aquel momento todos se sorprendieron decepcionados, pero cuentan quienes lo vieron que hubo alguien que se animó a cambiar su mirada por una de Amor y que esta mirada fue contagiando a las demás y todos querían una mirada nueva llena de Amor.
Desde aquel día quien mira al otro con Amor siempre recibe Amor.
P.D: Mishka es un nombre de origen hindú que significa el que regala Amor
Autora: Carmina Vallverdú del Olmo
En este cuento esta la enseñanza del arquetipo del Mono del Tzolkin.
Si quieres escuchar el audio de este cuento, aquí te dejo el enlace
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